pendientes calabazas
Colección naturaleza
Me encanta el otoño y soy una gran fan de la calabaza en la cocina: para sopas, para pasta, para quiche… y por supuesto para postres también (galletas, bizcochos). Estas de aquí no se pueden comer, porque están hechas de cobre y te romperías un diente. Pero son muy curriñas y seguro que te alegran las orejas.
Están hechas con base de sobre segueteada a mano, y esmaltes naranja y verde fundidos en horno a 900ºC. Las líneas están pintadas con esmaltes vitrificables negros, que se funden a 650ºC.
Características
- Calabazas pequeñas: 1,5 cm aprox.
- Calabazas medianas: 2 cm aprox.
- Enganches de los pendientes: plata de ley
29€